"Tengo el pase en mi poder"
Elio Giupponi le aseguró a Pasión Futsal que su llegada a Arsenal fue dentro del marco legal. Además, desmintió a Gabriel Tancredi y reveló los entretelones de sus conflictos con el DT de Lamadrid.
¿Cómo llegás a Arsenal?
Elio Giupponi le aseguró a Pasión Futsal que su llegada a Arsenal fue dentro del marco legal. Además, desmintió a Gabriel Tancredi y reveló los entretelones de sus conflictos con el DT de Lamadrid.
Faltaba su palabra. Elio Giupponi había elegido mantenerse al margen de los cruces entorno al dueño de su ficha, mientras Arsenal y Lamadrid lanzaban indirectas de uno y otro lado.
Desde los primeros días de febrero, el ex jugador de Pinocho se encuentra de pretemporada con Arsenal, donde comparte equipo con sus dos hermanos Juan y Erik, y asegura haber llegado con el pase en su poder. Mientras, en Lamadrid, indican que su ficha vale 30 mil pesos y que negociarían con cualquier club menos con el de Sarandí.
Por medio de mi hermano Juan, que ya había recibido el ofrecimiento a fines de 2012 sabiendo que Marcelo Ramón iba a ser el DT, le interesó el proyecto y se sintió cómodo y a gusto. Él, sabiendo que yo no iba a seguir en Lamadrid, me propuso hablar con la gente de Arsenal para que juguemos juntos acá. Me interesó y llegue al club con el pase en mi poder. Cuando nos sentamos con los dirigentes yo se los entregué y a partir de ahí arranqué la pretemporada como el resto del plantel que se unió a este nuevo proyecto.
¿Por qué te fuiste de Lamadrid?
Me cansé, no me sentía cómodo y no estaba con ganas de jugar. En mitad de campeonato me junté con el grupo, se los dije y casi ninguno de mis compañeros estuvo de acuerdo, pero algunos respetaron mi decisión.
¿Gabriel Tancredi te volvió a llamar?
En diciembre pasado, después de todo lo que había pasado, Tancredi me habló porque supuestamente estaba menos caliente y más frío. Me ofreció volver a Lamadrid, con un sueldo mensual, pero pagándome todo junto. Pero esa vez le dije que no, porque él me había dicho que falté a un compromiso cuando el que no cumplió la palabra desde hace varios años fue él y nunca se quiso hacer cargo. Incluso, en esa misma reunión, Tancredi me dijo que si yo aceptaba volver a jugar y alguno de los jugadores de Lamadrid se oponía, él lo iba a ´limpiar´ y le daba el pase en la mano porque supuestamente yo era su pieza fundamental en el club.
¿Qué pasó con Tancredi, qué fue lo que te molestó?
Es una historia larga que empezó en diciembre de 2008 mientras estábamos mirando un partido por el ascenso en Nueva Estrella. Yo todavía jugaba en Allende, tenía varias ofertas y Gabriel me ofreció quedarme por un viático de diez mil pesos al año, distribuido en $1000 por mes. A mí me resultó un beneficio porque era la primera vez que iba a cobrar por jugar. Pero cuando tenía que empezar a pagarme después de arrancar la pretemporada no recibí un solo peso y, pese a eso, yo seguí jugando. Cuando se lo fui a reclamar no se hacía cargo y me decía que si había habido algún arreglo eran 500 por mes, cuando su palabra habían sido $1000.
¿Ahí terminó?
No, eso fue lo primero. En el verano de 2011, después que la AFA desafilió a Allende, estaba todo arreglado para irme a River, casi cerrado, pero Gabriel no me dejó ir ahí porque tenía un problema personal con Facundo Ruscica. Paralelamente había una propuesta de Pinocho, que obviamente no le iba a decir que no porque es el mejor club de la Argentina, pero mi intención y donde yo quería ir era River, pero terminó siendo en Pinocho. Es más, iba a poner plata de mi bolsillo para el préstamo. Era ir a jugar a Pinocho o quedarme parado porque ya le había dicho que con él no iba a jugar ese año.
Sin embargo, después de todo eso, volviste a jugar con él...
Sí, en septiembre/octubre de 2011, antes de que termine el préstamo con Pinocho y sin saber si podía seguir ese vínculo, hicimos otro acuerdo de palabra con Tancredi para volver a Lamadrid en 2012. Pensé que iba a ser diferente que la primera vez, que podía llegar a cambiar, y además iba a jugar con mis compañeros y amigos de toda la vida que habíamos jugado en Allende. Pero ese acuerdo de palabra se cumplió a medias y cuando Gabriel quiso, porque supuestamente me iba a pagar todo en febrero, y lo terminó haciendo una parte en mayo y otra en junio, más allá que nunca me completó lo que me prometió.
¿En ese momento decidiste no jugar más?
Sí, a partir de ese momento no hablé más con Gabriel hasta diciembre. A veces iba a ver a Lamadrid, hablaba con los chicos todo bien y cuando me cruzaba con él ni nos saludábamos. En Lamadrid no quería jugar más y al último ofrecimiento mi decisión fue decirle que no, porque sabía que las promesas de Tancredi no se iban a cumplir como había pasado antes. Él me dijo que lo pensara, pero yo tenía claro que no quería jugar más con él como DT. Entonces Tancredi le puso un precio a mi pase que en ese momento a mí me dijo que era de 20 mil pesos. Pero esa semana un club de Primera división, que voy a guardarme el nombre, se contactó conmigo para decirme que Tancredi le había ofrecido mi pase por 30 mil pesos.
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