COPA AMÉRICA: ARGENTINA ANTE LA HORA DEFINITIVA

Los jugadores saben que se juegan la parada mas brava de la Copa América, y que además, quizás para muchos, sea la última oportunidad de salir campeón con la selección nacional.

Se acabo el tiempo de la especulación. Esta tarde, Argentina va en busca de lograr su 15to. titulo continental. No hay mas lugar para excusas. Muchos jugadores saben que quizás sea su ultima oportunidad de ganar algo con la selección nacional.
Por Joaquin del Arse.

Faltan apenas tres horas para que comience la final de la Copa América en el Estadio Nacional de Santiago de Chile, y será para estos jugadores, la segunda final en apenas un año de distancia, desde aquel Maracaná hostil a este estadio que arderá de chilenos que quieren quedarse con la primera copa oficial para su país. No la tendrá fácil la selección Argentina, por varios motivos, algunos extra futbolisticos. Pero el rival mas difícil es sin lugar a dudas, el propio equipo argentino. Los jugadores son conscientes que quizás sea su última oportunidad para saldar la gran cuenta pendiente que tienen con todos nosotros: ganar algo. Se nos escapo dos veces la Copa América, se nos escapó una Copa Confederaciones y el último Mundial. Ya no hay margen para otra derrota, y todos en el plantel nacional lo saben a la perfección. Saben que "ser campeones morales" no será asimilado por casi nadie de este lado de la cordillera, y saben además que por una cuestión propia de orgullo, deben dejar todo para quedarse con el titulo. Sería un bálsamo enorme, para aquietar a todos los que alguna vez, tildamos a este equipo de "pecho", en especial para Lio Messi, criticado a mansalva (yo mismo debo admitir, que me canse de criticarlo, por su rendimiento dispar con la celeste y blanca), y seria un espaldarazo enorme para el Tata Martino, que de esta manera encararía las eliminatorias de otra manera, un poco mas tranquilo dentro de un país que respira fútbol y no admite el fracaso o la derrota sin lucha.
Esperamos entonces el desarrollo y destino de esta final, con la esperanza de poder quebrar el maleficio de no poder ganar una copa oficial, y de esta manera, poner las cosas en su debido lugar, por lo menos, en América.