Publico Olé deportivo.
Es un caudillo, Cristian Campestrini. Aunque él diga que Arsenal trata de ser “un equipo de indios en donde no haya caciques”, su voz representa a la del grupo. Uno que, con las limitaciones que tiene, está metido en la pelea por el Inicial, y el miércoles disputará la final de la Copa Argentina ante San Lorenzo, un rival al que derrotó 2-1 el sábado, nutriendo la esperanza del grupo y de todo Sarandí de ir por la doble corona en este semestre. “Fue un triunfo importante, ante un grande, que vino con jugadores de recambio pensando en el miércoles, pero que a su vez pueden ser titulares en cualquier equipo. Estamos muy felices por el resultado que conseguimos”, explicó el hombre del brazalete, que además se fue “contento porque además con la victoria cuidamos el invicto en el torneo”. Ahora, claro, tanto Campe como sus compañeros están enfocados en lo que sucederá el miércoles, en Catamarca, otra vez ante el conjunto que dirige Juan Antonio Pizzi. “Ellos tienen un gran plantel, y nosotros estamos con lo justo. Jugaremos por la gloria, por el prestigio y por la Copa Libertadores”, sentenció el arquero. El mensaje, clarito...
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